
Educar desde el amor
POR: ELIANA VEGA
El Proyecto Salesiano Ecuador forma parte de las actividades salesianas destinadas a la atención a niñas, niños y adolescentes en condiciones de vulnerabilidad, especialmente en “situación de calle” y sus familias, mediante una propuesta educativa pastoral de calidad y calidez desde la Pedagogía de Don Bosco. En Guayaquil se encuentra ubicado en el Km 10 ½ vía a Daule. Está dirigido por el Padre Esteban Ortiz González quien con su destacada labor pastoral durante 15 años en la Ciudad de Machala y desde hace 7 años como Director de este centro trabaja incansablemente por los objetivos salesianos.
Me encuentro en la sala de reuniones de la fundación donde fui recibida muy amablemente por sus colaboradores para así dialogar con el Padre Esteban sobre las actividades que realiza el Proyecto Salesiano Guayaquil.
¿Cuál es la misión del Proyecto Salesiano Ecuador?
El Proyecto Salesiano Guayaquil es parte del Proyecto Salesiano Ecuador, surge aquí en nuestro país por parte de los salesianos para atender a los niños en situación de riesgo, vulnerabilidad, situación de calle. Este proyecto se inicia desde el año de 1977. Evidentemente no nació bajo el nombre de proyecto salesiano Ecuador sino de “atención a los chicos de la calle”, donde ha ido creciendo gracias a la educación de salesianos y laicos a lo largo de 44 años, y en Guayaquil estamos desde el año de 1993 donde el proyecto se hace presente en esta ciudad con el Padre Marco Paredes acompañado del Padre Pedro Vidal.
¿Qué les ofrece el Proyecto Salesiano a los niños, niñas y adolescentes de nuestro país?
La propuesta salesiana es de prevenir la calletizacion pero también erradicarla en caso de que hayan entrado en esta situación y se les ofrece la formación integral salesiana que se sintetiza en la famosa expresión de Don Bosco “Buenos cristianos, honestos ciudadanos”
¿Cuál es la metodología que utilizan para abordar a los niños, niñas y adolescentes?
La metodología es la de acercarse, hacerse amigos, crear un ambiente de confianza, hacerle una propuesta de un cambio de vida y luego se van involucrando con la fundación. En cierta forma algunos métodos han cambiado en cuanto a lo operativo ya que hace algunos años no había las leyes que protegían a los niños era una manera más sencilla para abordarlos donde se les comunicaba que tendrían un lugar donde vivir y alimentarse. Hoy en día ese proceso de acercamiento se puede dar pero ya el ingreso es con una orden judicial, existe una disposición legal para que un niño o un adolescente entre a una casa de acogimiento, ahí es donde se hace el proceso y se comunica a las instancias correspondientes, y luego ingresa o muchas veces la Dinapen se acerca con una orden judicial y se recibe al niño. Evidentemente no somos la única instancia que ofrece esta alternativa a quienes están en situación de calletizacion o en riesgo por su situación de vulnerabilidad.
¿Cómo ha afectado la pandemia a las actividades educativas que realizan?
Los chicos que estuvieron en acogimiento durante la pandemia nunca salieron hasta diciembre donde sus familias ya que ese es el proceso que deben llevar para que se vayan involucrando con el núcleo familiar, que es el ambiente natural de crecimiento y desarrollo de la persona. Se tuvieron las normas de bioseguridad y las prevenciones correspondientes que los jueces impusieron. El tiempo que estuvieron con sus familias fueron 10 días, cuando regresaron se les realizaron los exámenes respectivos donde también guardaron cuarentena en base a las normas del COE. Ellos están siendo atendidos permanentemente por los educadores, además los estudiantes que viven en la fundación reciben clases de manera presencial pero al mismo tiempo online ya que existen niños que no viven aquí pero están en la escuela de educación básica que sigue siendo online para los externos y es presencial para quienes están en acogimiento.
¿Cuál es el vínculo que tienen con la Universidad Politécnica Salesiana y como ha sido su experiencia con la U.P.S?
En primer lugar todos somos Salesianos por ahí va el vínculo que mantenemos con la universidad. Es una relación formal con las sedes Cuenca, Quito especialmente con la sede Guayaquil ya que nos encontramos aquí mismo. Nos aportan económicamente pero también los alumnos vienen a realizar actividades los días sábados con los chicos. Es importante el apoyo de los estudiantes de la universidad ya que nos ayudan con el mantenimiento del sistema eléctrico y otras cosas más. Muchas veces recibimos capacitaciones, ya sea con los docentes o los estudiantes supervisados por los mismos, la experiencia que tenemos es positiva siempre disponibles para el proyecto que va en marcha.
¿Cómo se plantea el panorama para el nuevo año en las actividades de la organización?
En las condiciones que nos encontramos nos vamos a mantener, no va a ver mayor cambio. Nosotros no solo trabajamos con los chicos que están en acogimiento sino, también en los barrios periféricos de la CIUDAD específicamente en Monte Sinaí, Socio Vivienda y en la Trinitaria en el sector Nigeria y alrededores, donde ahí se hace un proceso de acompañamiento y prevención y si se detecta algún caso que necesita acogimiento se hace el proceso legal correspondiente. Antes de la pandemia los chicos acudían a los centros donde se les hacía el proceso de refuerzo escolar, actividades formativas, recreativas siempre con la perspectiva de prevenir la calletizacion y ayudarlos a crecer.
Además manifestó el Padre Esteban Ortiz González, de la fundación proyecto Salesiano Ecuador, que realizan cursos de capacitación tanto a los jóvenes como a las madres de familia, muchos de ellos se están realizando bajo la modalidad online como:
- Taller de mecánica
- Taller de Carpintería
- Corte y confección
- Belleza
- Manualidades
- Panadería

Foto: Eliana Vega